lunes, 13 de abril de 2009

Un oral inesperado

Muy temprano empezando la semana me sentía muy nerviosa por lo que había pasado en días pasados más aun así me vestí de lo más linda que me podía sentir porque sabía que lo miraría de nuevo con toda la alevosía esa mañana me tome más tiempo que otros días para vestirme bien sin demostrar lo ramera que me sentía por dentro cuando uno vive esta experiencia todo es diferente de repente uno deja de ser la persona que todos conocen busque mi mejor ropa interior es un panti en forma de short color blanca de encaje translucido haciendo notar mi triangulito de pelos que adornan mi vagina, me afeite muy bien mis labios externos y sobre todo bien perfumada por si acaso, me puse un brazier que levanta aun mas mis pronunciados senos y sobre todo una blusa que tenía un excelente escote. Mi falda de flores hoy no quise vestir de acuerdo al clima de verano.

Al llegar a la oficina las personas del edificio me notaron algo e incluso hicieron mención de lo bien que me veía, hasta que llego El y solo me dijo “te ves muy rica tengo ganas de cogerte aquí mismo” me hizo sonreír y a la vez sus palabras me hicieron temblar las rodillas. Ya por la tarde antes de cerrar el se fue a comer a mi oficina y me dijo “te tengo un regalo” insistí en saber que era pero el dijo “ya lo veras” se puso en una esquina de la vitrina y yo estaba sentada detrás de ella y me decía “súbete la falda quiero verte las piernas” y como eran cosas que no estaba acostumbrada hacer las hacia pero me causaban tanta excitación y nerviosismo, pero me tenia sumisa a sus caprichos aun había gente circulando por los pasillos y el pedía ver más arriba con todo y mi pena pero la excitación es mucha y no me había vestido así para nada así que le deje ver ese calzoncito blanco transparente y note que su erección empezó a crecer dentro de sus pantalones deportivos mostrando su gran poder sexual de un joven de 19 años que me tenia loca.

No pasaron muchos minutos cuando derrame el vaso con plumas y me tendí al piso a levantarlas cuando estaba en el suelo a gatitas metió su mano por mi espalda primero hacia arriba y después hacia abajo por debajo de mi falda y sus dedos escurridizos alcanzaron mi rajadita que obviamente estaba muy húmeda y metió un dedo ligeramente en mi panocha diciendo “me encanta tu panochita de niña” y arrastrando su dedo por mis nalgas me metió su dedo húmedo con mis fluidos en mi colita me puso como una braza ardiente lo deje hasta que lo saco y se lo chupo yo me hinque diciendo nuevamente “cuál es mi regalo?” entonces fue cuando se saco la verga y me dijo mira estaba igual de hermosa que siempre solo que esta vez tenía todos los pelos afeitados se veía más larga y hermosa suavecita y imponente así que no pensé ni donde estaba, me acerque a su cabecita y la empecé a besar muy despacito era algo muy loco con mi boca medio cerrada hizo presión para meterla en mi boca y yo escondí los dientes dejando los labios medio cerrados para que el sintiera como si fuera otro hoyo mas de mi cuerpo me tomo de las cabeza y metió todo lo que pudo del miembro en mi boca su sabor y su piel su verga caliente y dejando sus líquidos en mi lengua se la mame como si fuera la última verga que probaría se la chupaba con gran hambre de que descargara todo en mi le lambí todo el tronco los huevos y sobre todo esa cabeza grande y rojiza ayudándome de las manos le masturbe el tronco mientras mis labios le daban suaves caricias en su cabeza en ese momento mis manos sintieron lo que venía por lo largo del tronco fue divino un gran chorro de semen caliente reboto en mi garganta golpeando con fuerte presión seguido de otros más yo solo recibía con gusto ese gran manjar que llenaba mi boca y garganta lo saboreé por unos momentos y me lo pase sin respingo fue divino me quede viendo a sus ojos que los tenia entre cerrados y la saque de mi boca después de chupar todo lo que pude el temblando de sus piernas me acariciaba el pelo mientras yo con mi lengua recogía la última gota que salía por su glande fue súper excitante el me enseno lo que hizo por mi mientras yo le di un regalito que nunca me había atrevido a recibir directo en mi boca fue algo muy rico cuando le dije se volvió loco diciendo que me había desvirginado la boca. Me levante hacia la silla y me senté seguir platicando como si nada pero en medio de mis piernas corría algo caliente húmedo y salía vapor era una hembra ardiente a mis 39 años me sentía una depravada, es algo tan rico que ahora hice una pausa para masturbarme ustedes entenderán.

Esa tarde el me dejo así regreso a su oficina y yo prepare para cerrar e ir a recoger a mis hijas de la escuela e irnos a casa.

1 comentario:

  1. ME GUSTO ES BUEN RELATO GRACIAS QUIERO SEGUIR TODOS LOS QUE ESCRIBAS

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